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Infecciones asociadas a la atención de salud
Las Precauciones Estándar deben seguirse sin importar el estatus de infección sospechada o confirmada del paciente, en cualquier entorno donde se proporcionan servicios médicos. Estas prácticas están diseñadas tanto para proteger al profesional de la salud, como para evitar que el profesional de la salud propague infecciones entre los pacientes. Las Precauciones Estándar incluyen: higiene de las manos, uso de equipo de protección personal (ejemplos de éste son guantes o batas o mascarillas), prácticas de inyección segura, manejo seguro de equipos o superficies potencialmente contaminados dentro del entorno del paciente, e higiene respiratoria y el manejo de la tos. Algunos principios generales para los Profesionales de la Salud incluyen los siguientes: Para evitar la propagación de agentes patógenos de la sangre y enfermedades infecciosas, los profesionales de salud tienen la responsabilidad ética y profesional de adherirse a las prácticas y principios de control de infecciones científicamente aceptados o basados en evidencia, y supervisar el desempeño de aquellos por quienes el profesional es responsable. Diversas organizaciones publican las mejores prácticas para el control de infecciones. Sin embargo, algunos estados, incluyen una responsabilidad legal para adherirse a las prácticas de control de infecciones. Siga las directrices de su empresa. Las infecciones asociadas a la atención de salud (o IAAS), también conocidas como infecciones nosocomiales, son aquellas que se originan o se producen en un entorno de hospital o cualquier recinto de salud. El CDC estima que, tan solo en hospitales estadounidenses, las infecciones asociadas a la atención de salud suman 1.7 millones de infecciones y 99,000 muertes asociadas cada año. Las infecciones pueden estar asociadas con los dispositivos utilizados en procedimientos médicos, tales como catéteres o ventiladores. Los tipos más comunes de infecciones asociadas a la atención de salud son, infecciones del torrente sanguíneo, neumonía, neumonía asociada al ventilador, infección del tracto urinario (ITU), e infecciones en el sitio quirúrgico. Una infección del tracto urinario es el tipo de infección más comúnmente asociado a la atención de salud. Ésta se asocia a menudo con la colocación de un catéter o tubo que se utiliza para vaciar la orina de la vejiga. Someterse a una cirugía puede aumentar el riesgo del paciente de contraer una infección, al ofrecer a las bacterias una vía de entrada en un área normalmente estéril del cuerpo. Después de la cirugía, la herida quirúrgica puede infectarse cuando el vendaje es cambiado. La neumonía asociada al ventilador se produce cuando las bacterias y otros gérmenes entran en los pulmones por un tubo endotraqueal que se conecta a un ventilador. Cuando las bacterias comienzan a crecer en el tubo, se desarrolla una infección que conduce a la neumonía. Las bacterias pueden entrar al cuerpo en el lugar donde una línea intravenosa o catéter es insertado. Una infección local puede desarrollarse en la piel alrededor del catéter. Las bacterias también pueden entrar a la sangre por las venas que están más cerca del corazón y causar una infección más grave conocida como septicemia. Mientras más profundo se coloca un catéter, mayor es la posibilidad de desarrollar una infección. Los patógenos comunes que causan las infecciones nosocomiales son el Staphylococcus aureus, Pseudomonas aeruginosa, E. coli, Klebsiella, y Clostridium difficile. SARM- Staphylococcus aureus resistente a la meticilina. Se trata de una cepa de estafilococo que es resistente a los antibióticos de amplio espectro comúnmente utilizados para tratarla. El SARM puede ser mortal. Pseudomonas aeruginosa-- patógenos que son altamente resistentes a los antibióticos. Ya que los antibióticos generalmente no son efectivos, puede conducir a una infección más grave: como la septicemia, infecciones del tracto urinario, neumonía o infecciones pulmonares crónicas. Ahora, el E. Coli-- típicamente causa severos calambres en el estómago, diarrea (a menudo con sangre), y vómitos. Algunas cepas de E. coli pueden ser potencialmente mortales. Klebsiella es un tipo de bacteria Gramnegativa que puede causar diferentes tipos de infecciones asociadas al cuidado de la salud, incluyendo neumonía, o infecciones del torrente sanguíneo, infecciones en heridas o del sitio quirúrgico, y meningitis. Clostridium difficile conocido como C-Diff puede causar una infección gastrointestinal. Las esporas de C-diff se transfieren a los pacientes, principalmente a través de las manos y el personal de salud que ha entrado en contacto con una superficie o artículo contaminado. Los pacientes más en riesgo son las personas de la tercera edad, especialmente aquellas que ya están tomando antibióticos. C-diff es a menudo el resultado del uso excesivo o el uso inadecuado de antibióticos Cuando se trata de enfermedades infecciosas, la prevención es la principal estrategia para reducir la incidencia de infecciones adquiridas en el hospital. Los pacientes no están viniendo a ser tratados para enfermarse más, están viniendo a recuperarse. Y es su responsabilidad, y la mía, hacer lo que se supone que debemos hacer para asegurarnos de que están recibiendo el mejor y más saludable tratamiento posible.
Las Precauciones Estándar deben seguirse sin importar el estatus de infección sospechada o confirmada del paciente, en cualquier entorno donde se proporcionan servicios médicos. Estas prácticas están diseñadas tanto para proteger al profesional de la salud, como para evitar que el profesional de la salud propague infecciones entre los pacientes. Las Precauciones Estándar incluyen: higiene de las manos, uso de equipo de protección personal (ejemplos de éste son guantes o batas o mascarillas), prácticas de inyección segura, manejo seguro de equipos o superficies potencialmente contaminados dentro del entorno del paciente, e higiene respiratoria y el manejo de la tos.